Audrey Tang: la visionaria hacker que acabó siendo ministra

Audrey Tang. Fotografía: @daisuke1230.
Cropped by KOKUYO.

La historia está llena de visionari@s. Gente adelantada a su tiempo que utiliza las herramientas que tiene a mano o inventa otras nuevas con el objetivo de mejorar la vida de las personas.

Supongo que es un poco pronto para decirlo, pero la mujer que os presentamos hoy puede ser una de esas personas que pasará a la posteridad como alguien que trajo una nueva visión de las cosas. De hecho, ya lo ha hecho de alguna manera: es una referente del software libre y de la programación a nivel mundial, una aclamada activista política y la primera persona transgénero en obtener una cartera ministerial. Y sólo tiene treinta y seis años… Ella es Audrey Tang, la visionaria hacker que acabó siendo ministra.

Audrey Tang nació el 18 de abril de 1981 en Taiwan, en el seno de una familia de periodistas. Su alto coeficiente intelectual (tiene un CI de 180) pronto se hizo notar… con seis años era un genio de las matemáticas y leía literatura clásica en varios idiomas. Su pasión por las matemáticas y la lógica se hizo más fuerte cuando cumplió ocho años y encontró un libro de programación en su casa. Aquel libro la enganchó de tal manera que aprendió programación de forma autodidacta y muy curiosa: dibujando un teclado en un papel y escribiendo/programando en él.

Pequeño inciso: Sí querid@ lector@, Audrey Tang fue capaz de aprender programación sola y sin ordenador… con ocho años… Me vas a permitir el comentario, pero a mí me parece simplemente impresionante. Tal vez sea porque soy una auténtica “atea” en esto de la programación (hice unos pinitos con Fortran hace años, y la verdad, quisiera olvidar aquella experiencia). Aunque ella parece quitarle hierro al asunto: “Aprendí programación sin una máquina. Es muy educativo: la programación se convirtió en ese momento en una forma de pensar”. Ojalá yo pudiera tener esa forma de pensar…

Ante semejante talento y entusiasmo sus padres no tuvieron otro remedio que comprarle un ordenador… ordenador que utilizó para programar un juego educativo para su hermano pequeño. Aunque Audrey dejó la escuela y se formó en casa (gracias al nacimiento de Internet/Word Wide Web), con doce años ya era capaz de programar en lenguaje Perl y con dieciséis fundó su primera empresa, cuyo producto era un buscador de canciones en chino mandarín. La meteórica carrera de Audrey la llevó desde Taiwan a Silicon Valley, donde se convirtió en consultora de Apple con tan sólo diecinueve años. También trabajó de consultora para BenQ. En 2014 anunció su “jubilación” de la actividad privada para dedicarse a proyectos públicos/políticos.

Con veinticuatro años asumió la identidad de género femenina, aunque ella no se considera persona transgénero, sino post-genero.

La vida de Tang se define en dos grandes aspectos: su enorme contribución a la programación y al software libre y su activismo político.

Como programadora, fue la impulsora y líder el proyecto Pugs, que buscaba implementar el lenguaje Perl 6 mediante el uso de lenguajes Perl y Has kell. Inició más de cien proyectos entre 2001 y 2006, incluyendo el popular Perl Archive Toolkit (PAR), un sistema multiplataforma desarrollado para Perl. También desarrolló varios programas de software libre como SKV, Request Tracker y Slash, y ayudó en el diseño de otros como Kiwi y Windows RT.5. Además de desarrolladora, ha sido traductora de varios libros relacionados con código abierto al chino tradicional.

Nuevo inciso: aunque para una “atea” de la programación como yo algunos de estos datos no digan mucho, han sido una auténtica revolución en el mundo de la programación y el software libre. Bravo por ella.

El activismo político de Audrey Tang está estrechamente ligado al concepto de libertad: libertad del software, libertad en la red, libertad de información y libertad de expresión. Su ciberactivismo se hizo patente por primera vez en 2012, cuando publicó junto con otros hackers, y en respuesta a una reforma económica perjudicial para ciudadanía taiwanesa, los datos del presupuesto del Gobierno en la plataforma “g0v.tw”. Posteriormente, tuvo un papel fundamental en las protestas llevadas a cabo por el Movimiento Girasol en el año 2014, retransmitiendo en directo y para todo el mundo la ocupación del Parlamento por parte de estudiantes, en denuncia por la aprobación del Tratado de Libre Comercio entre China y Taiwan. Su objetivo era, al igual de la del resto de estudiantes, pedir transparencia y más democracia en relación a aquel tratado.

Se considera una “hacker cívica” y una “anarquista conservadora” y defiende a capa y espada la participación ciudadana y el derecho a información como herramientas imprescindibles para la democracia. Por eso sigue trabajando en el desarrollo de plataformas como “g0v.tw” y “vTaiwan.tw”, donde se promueven la transparencia y la participación activa. Un ejemplo: los taiwaneses crearon juntos la regulación de Uber y Airbnb para su país gracias a la plataforma “vTaiwan.tw”.

Audrey Tang. Fotografía: David Fernández / Flickr Creative Commons.

Desde 2016 Audrey realiza su activismo político desde las instituciones, ya que aquel año fue nombrada Ministra Digital sin cartera. Según sus palabras, su objetivo es ayudar a resolver problemas basándose en la tecnología y el software libre, impulsar un gobierno más transparente y transformar a Taiwan en la cuna tecnológica de Asia, sin perder de vista la participación cívica y los derechos digitales de los ciudadanos.

Espero que lo consiga, porque la idea me parece muy visionaria.

PD. En esta entrada de la propia Audrey Tang podéis encontrar una lista de herramientas disponibles para que la ciudadanía de Taiwan ejerza sus derechos democráticos basados en la participación ciudadana y la transparencia. No estaría mal tener herramientas parecidas por aquí…

Referencias