Utako Okamoto: «Va a ser bueno. Va a ser eficaz»

Vidas científicas

En los años 1950, la médica Utako Okamoto y su equipo buscaban un fármaco que tratara la hemorragia postparto, la principal causa de muerte materna en el mundo. Y en su búsqueda descubrieron el ácido tranexámico. Pero su hallazgo fue ignorado hasta algunas décadas más tarde.

Utako Okamoto.

Utako Okamoto nació el 1 de abril de 1918 en Tokio (Japón). Comenzó a estudiar odontología en 1936, pero pronto giró hacia la medicina, graduándose en la Universidad para Mujeres de Medicina de Tokio en diciembre de 1941.

En enero de 1942, la recién graduada entró como ayudante de investigación en la misma universidad en la que estudió. Lo consiguió gracias a la complicidad de un neurofisiólogo, el Dr. Hayashi, que era de los pocos que apoyaba a las mujeres. Con él comenzó a estudiar el cerebelo.

Tras la Segunda Guerra Mundial y la segunda guerra chino japonesa, Okamoto se trasladó a la Universidad Keio en Tokio. Allí, junto a su marido Shosuke Okamoto, comenzó a estudiar la sangre: los recursos escaseaban y, llegado el caso, podían usar su propia sangre para investigar. Su objetivo era encontrar un fármaco para tratar la hemorragia postparto, la principal causa de muerte materna en el mundo. Comenzaron estudiando el ácido aminocaproico, utilizado para controlar sangrados en los que coágulos de sangre se disuelven demasiado rápido. Después, Utako Okamoto descubrió el ácido tranexámico y se centró en su estudio. Era casi treinta veces más potente que el ácido aminocaproico como antifibrinolítico y por ello, tras las comprobaciones oportunas, podía llegar a ser un excelente agente antihemorrágico. Shosuke y Utako Okamoto publicaron sus descubrimientos sobre este fármaco en la revista Keio Journal of Medicine en el artículo titulado Amino-Methyl-Cyclohexane-Carbolic Acid: AMCHA. A New Potent Inhibitor of Fibrinolysis (1962).

Entre 1966 y 1990, Utako Okamoto trabajó en la Universidad Kobe Gakuin. En 1980, junto a su marido, fundó un Comité para proyectos sobre trombosis y hemostasis. Nunca pudo convencer a los obstetras para que probaran el ácido tranexámico en hemorragias postparto. Sin embargo, en 2009, este fármaco pasó a formar parte de la lista de la OMS de medicinas esenciales para su uso en cirugía cardíaca.

Infografía extraída de HNN.

En 2010 comenzó a realizarse la prueba WOMAN (World Maternal Antifibrinolytic, Antifibrinolítico Maternal Mundial), un ensayo controlado aleatorizado sobre la eficacia del ácido tranexámico en unas 20 000 mujeres de veintiún países con hemorragia postparto. Utako Okamoto falleció a finales de abril de 2016, antes de finalizar el estudio y publicarse los resultados positivos de su utilización, como ella había vaticinado. En abril de 2017 se publicaron las conclusiones de la prueba WOMAN (ver [7]). Mostraban que el ácido tranexámico reducía las muertes en 10 036 mujeres tratadas frente a las 9 985 a las que se administró un placebo. Además, el fármaco no provoca efectos adversos, es seguro y eficaz, ayuda a mantener intactos los coágulos que se forman naturalmente en la sangre y, por ese motivo, detiene rápidamente las hemorragias. Por si fuera poco, es un tratamiento barato.

El ácido tranexámico es ampliamente utilizado hoy en día en cirugía y traumatología para disminuir el sangrado y la necesidad de transfusiones sanguíneas. Ian Roberts, de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, es el investigador responsable del estudio CRASH-2, un ensayo controlado aleatorizado y una evaluación económica de los efectos del ácido tranexámico sobre la muerte, los eventos de oclusión vascular y la necesidad de transfusión en pacientes con trauma hemorrágico. Junto a su equipo ha demostrado que la administración temprana de este fármaco reduce la muerte en pacientes con trauma hemorrágico. Roberts conoció a Utako Okamoto en 2011. Impresionado por su fuerte personalidad, realizó un documental sobre ella. Puede verse debajo con subtítulos en inglés.

Utako Okamoto, con 93 años en ese momento, habla en ese documental de su trayectoria investigadora y vital. Entre otros, comenta el apoyo inicial que recibió por parte de su mentor, el Dr. Hayashi, en la Universidad para Mujeres de Medicina de Tokio. Comenta también las numerosas horas de trabajo que invirtió en el laboratorio, muchas más que las de sus colegas varones. Utako explica cómo la situación empeoró al trasladarse a la Universidad Kobe Gakuin. Recuerda, en particular, una vez en la que asistió con una colega a un congreso de pediatría, en la que uno de los asistentes les interpeló diciéndoles que ‘esa reunión no era para mujeres y niños’. También menciona el momento en el que presentó por primera vez sus investigaciones en público. Reconoce que no estaba nerviosa, pero que fue cruelmente ridiculizada, cuando algún participante en el evento le dijo que ‘se preguntaba si iba a bailar para ellos’.

Al ser madre, sus dificultades aumentaron ya que, al no disponer de guarderías, debía llevar a su niña con ella al laboratorio. Cuando era solo un bebé, trabajaba con ella colgada en su espalda, esperando que se portara bien. Después de dio cuenta que el laboratorio podía ser peligroso para la pequeña y se arregló de otra manera.

En esta entrevista, respecto al ensayo WOMAN antes citado y tan esperado por Utako Okamoto durante décadas, la investigadora afirmaba con contundencia:

Va a ser bueno. Va a ser eficaz. Sin hacer la investigación, conozco los resultados.

Efectivamente, no se equivocaba.

Referencias

[1] Editorial (2012). Bringing women to the forefront of science and medicine. The Lancet 379: 867

[2] Geoff Watts (2016). Obituario Utako Okamoto. The Lancet 437: 2286

[3] Life and work of Okamoto Utako, YouTube

[4] TXA: The Utako Okamoto Story, Vimeo

[5] Utako Okamoto, TXA

[6] Utako Ukamoto, Research Gate

[7] WOMAN Trial Collaborators (2017). Effect of early tranexamic acid administration on mortality, hysterectomy, and other morbidities in women with post-partum haemorrhage (WOMAN): an international, randomised, double-blind, placebo-controlled trial. The Lancet 389: 2105-2116

[8] Utako Okamoto, Wikipedia

[9] ¿Por qué un fármaco creado por una científica japonesa hace 50 años puede ahora salvar la vida de miles de mujeres en todo el mundo?, BBC Mundo, 27 abril 2017

Sobre la autora

Marta Macho Stadler es doctora en matemáticas, profesora del Departamento de Matemáticas de la UPV/EHU y colaboradora en ::ZTFNews y la Cátedra de Cultura Científica de la UPV/EHU.

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