La astrónoma estadounidense Beverly Turner Lynds (1929-2024) dedicó su vida al estudio de nubes de polvo y gas en la Vía Láctea y más allá. Su capacidad de observación y su mirada curiosa sobre los espacios oscuros del cosmos dieron lugar a dos catálogos astronómicos muy influyentes, uno de nebulosas oscuras y otro de nebulosas brillantes. Su obra no solo iluminó regiones hasta entonces desconocidas del universo, sino también el camino para futuras generaciones de científicas al promover la educación y la igualdad en el ámbito de la astronomía.

Beverly Ann Turner nació el 19 de agosto de 1929 en Shreveport, Luisiana (EE.UU.), aunque la familia se trasladó a Nueva Orleans cuando ella tenía tres años. Desde joven sintió fascinación por el cosmos, motivación que la llevó a querer ser astrónoma profesional. Sin embargo, su camino hacia el conocimiento no estuvo exento de obstáculos, ya que la Universidad de Chicago le retiró la oferta de admisión a estudios de posgrado al descubrir que era mujer. Lejos de rendirse, Beverly se postuló a un puesto como asistente en el Observatorio Lick, cerca de San José, California, donde adquirió experiencia práctica asistiendo a dos reconocidos astrónomos: a Nicholas Mayall con la medición de velocidades radiales de galaxias, y a George Herbig con programas espectroscópicos utilizando el refractor de 91 cm.
Su tenacidad y habilidades le permitieron acceder al programa de posgrado en astronomía de la Universidad de California en Berkeley, donde obtuvo su doctorado en 1955 con una tesis sobre los espectros de las enanas blancas, unos de los remanentes estelares más abundantes del universo. Durante esta etapa conoció a su compañero de estudios y marido a partir de 1955, Clarence Roger Lynds –de quien tomó prestado el apellido– y tuvieron una hija. La pareja se divorció en 1986 y Beverly volvería a casarse con el también astrónomo Leo Goldber.
Mapeando el cosmos: el legado de los catálogos Lynds
Tras trabajar como investigadora asociada en Universidad de California en Berkeley (1955-1958), en 1959 los Lynds se trasladaron temporalmente al recién inaugurado Observatorio Nacional de Radioastronomía (NRAO, por sus siglas en inglés) en Virginia Occidental. Allí, el director Otto Struve, a quien Lynds ya había asistido en la redacción de un libro de texto de astronomía, le encomendó la estimulante tarea de construir una biblioteca de astronomía desde cero, un recurso vital para el observatorio en la era previa a internet.
La contribución científica más destacada de Beverly Lynds fue, indudablemente, su trabajo de catalogación de las nebulosas –nubes de polvo y gas interestelar, fundamentales porque en ellas crecen nuevas estrellas y planetas–. Nuestra protagonista dedicó infinidad de horas a trazar sobre papel vegetal los contornos de las nebulosas oscuras que podía ver en las placas astronómicas –una forma temprana de fotografía que utilizaba placas de vidrio para capturar imágenes del cielo nocturno–. Anotaba las coordenadas de las nebulosas, medía sus áreas con un planímetro calibrado y estimaba su oscuridad en una escala del 1 al 6. Publicó su catálogo de 1802 nebulosas oscuras en la revista Astrophysical Journal en 1962. Posteriormente, repitió este proceso con nebulosas de emisión y reflexión conocidas y desconocidas y remanentes de supernova, publicando su catálogo de nebulosas brillantes en la misma revista en 1965. Estos trabajos no solo ilustraron regiones hasta entonces desconocidas del universo, sino que marcaron un estándar de calidad en catalogación astronómica. Aún en la actualidad siguen siendo una herramienta indispensable para las personas que se dedican a explorar la formación estelar y la evolución de las galaxias.
Educadora y escritora comprometida con la igualdad
El trabajo de Lynds no se limitó a la catalogación. También fue profesora asistente y asociada de astronomía en la Universidad de Arizona (1961-1971) y astrónoma del Observatorio Nacional de Kitt Peak (1971-1986), período en el que sus investigaciones sobre nebulosas retomaron fuerza al estudiar la conexión entre nebulosas brillantes y oscuras. Lynds descubrió que era más fácil analizar esta relación en galaxias que no fueran la nuestra. También trabajó como consultora de astronomía para varias organizaciones en la etapa final de su carrera y, tras su jubilación, dedicó gran parte de su tiempo a luchar contra las discriminaciones por razones de color y/o género en el ámbito de la astronomía.
Además de sus influyentes catálogos, Lynds fue coautora del libro de divulgación Elementary Astronomy (1959) junto a Otto Struve y Helen Pillans, considerada una obra de referencia para introducir a estudiantes en las maravillas del universo. En 1987 publicó Dark Nebulae, Globules, and Protostars, centrado en la formación estelar y la materia interestelar, consolidando así su reputación como líder de pensamiento y gran comunicadora de conceptos astronómicos complejos.
Beverly Turner Lynds, la científica que ayudó a astrónomas y aficionados a explorar dónde nacen y se ocultan las estrellas, vivió intensamente su vocación científica hasta sus últimos años. Falleció el 5 de octubre de 2024 en Portland (Oregón, EE.UU.) a consecuencia de un derrame cerebral. Tenía 95 años.
Referencias
- Rod Pommier, Beverly Lynds, creator of landmark catalog of dark nebulae, dies at 95, Astronomy, 7 octubre 2024
- Rodney Pommier, Beverly Turner Lynds, 1929–2024, Sky & Telescope, 14 octubre 2024
- Women in Astronomy – Beverly Turner Lynds, Explore Scientific
- Beverly Turner Lynds, Wikipedia
Sobre la autora
Edurne Gaston Estanga es doctora en ciencia y tecnología de los alimentos. Actualmente se dedica a la gestión de proyectos en organizaciones que fomentan la difusión del conocimiento de la ciencia y la tecnología.