Elizabeth “Jake” Feinler, la científica informática que le ponía nombre a los ordenadores conectados a internet

Vidas científicas

En el año 2025, para una gran parte de la humanidad, el uso cotidiano y constante de internet hace que resulte difícil imaginar la vida cuando no existía. Siempre resulta interesante y sorprendente descubrir cómo se fue construyendo y cómo los pilares básicos de su funcionamiento, que damos por sentados, fueron creados por alguien en algún momento. De dónde no había nada alguien imaginó elementos que hoy nos resultan tan elementales que apenas conocemos su existencia. Simplemente están ahí, funcionan y construimos sobre ellos.

Una de esas vigas que sostienen nuestra forma de relacionarnos entre nosotros y con el mundo la erigió en gran medida una mujer llamada Elizabeth “Jake” Feinler, científica informática y pionera en el desarrollo del lenguaje común que permitió que los primeros ordenadores conectados entre sí pudiesen entenderse, y que luego se extendió y se convirtió en un estándar básico de internet.

ARPAnet, la semilla de internet

Elizabeth J. Feinler. UOC.

La red ARPA (Advanced Research Projects Agency), la semilla original de lo que hoy es internet, nació a finales de la década de los años 1960 como parte de un proyecto del Departamento de Defensa de Estados Unidos, con la idea de crear una red de computadoras interconectada por teléfono sin un centro concreto. Aunque surgió como resultado de una iniciativa militar, esta red sirvió desde el principio como una herramienta para la investigación. En ese momento, los distintos sistemas que utilizaban los ordenadores, a menudo incompatibles, limitaba las posibilidades de esta primera red.

En 1967, los responsables de la Oficina de Técnicas de Procesamiento de Información (IPTO por sus siglas en inglés) de ARMA propusieron un protocolo que utilizase siempre el mismo idioma de manera que permitiese la intercomunicación de redes más grandes y con más ordenadores. En este caso no se trataba solo de un esfuerzo investigador, también de un impulso práctico para hacer estas redes más útiles. Durante el periodo de implementación de este protocolo y a medida que la red empezaba a crecer, Elizabeth “Jake” Feinler trabajaba en el Instituto de Investigación de Stanford (SRI), una de las primeras instituciones que se unió a la red ARPA.

Una curiosidad de la que nunca volvió

Feinler nació en West Virginia, en Estados Unidos, el 2 de marzo de 1931. Ella fue la primera de su familia en ir a la universidad, aunque inicialmente su carrera estaba orientada a la investigación bioquímica. Sin embargo, mientras consideraba empezar a trabajar en su doctorado decidió posponerlo y ganar algún dinero trabajando un par de años en el Servicio de Abstracts Químicos, una división de la Sociedad Estadounidense de Química, como asistente de edición en un enorme proyecto para indexar todos los compuestos químicos del mundo.

Aquel trabajo provocó en ella una gran curiosidad sobre cómo se podía crear y organizar una base de datos tan grande, y ya nunca volvió a dedicarse a la bioquímica. En vez de eso empezó a trabajar en el Instituto de Investigación de Stanford, donde se dedicó a desarrollar el Manual de Psicofarmacología y el Manual de Economía de los Procesos Químicos, otras dos grandes compilaciones de datos.

Pero el trabajo específico para el que Feinler fue contratada fue el desarrollo de un manual de recursos para el manejo de ARPAnet (la red ARPA), algo concreto, específico y resumido para ser compartido en una conferencia que iba a celebrarse. Sin embargo, su papel evolucionó rápidamente ya que su trabajo era esencial para el desarrollo de una comunidad mayor de equipos conectados.

“Servicio de atención al usuario de internet, ¿dígame?”

Se convirtió en una experta reconocida en todo lo que tenía que ver con esa red y sus procesos. En 1974, Feinler era la investigadora principal del Centro de Información de la Red (NIC) para ARPAnet. Este centro recopiló y documentó toda la información necesaria para ayudar a los usuarios a acceder y utilizar ARPAnet, mantuvo actualizado el directorio de equipos que se conectaban a esta red que no paraba de crecer y desarrolló los estándares comunes necesarios para utilizarla de forma eficaz. Durante algún tiempo su equipo llegó a operar un servicio de asistencia telefónica que estaba activo 24 horas al día, 7 días a la semana. Más adelante, ese registro de equipos conectados se utilizó para controlar el acceso de terminales, rastrear su actividad y facturar los pagos.

En 1975, la Agencia de Comunicación de Defensa pasó a ser la responsable de ARPAnet y decidió dividirla en dos redes distintas, una con fines exclusivamente militares y la otra destinada a la investigación. Cuando se desarrollaron el email y el File Transfer Protocol (FTP), el NIC que Feinler encabezaba comenzó a utilizarlos para distribuir información a los usuarios a través de la propia red.

Árbol DNS. Wikimedia Commons.

A medida que internet se expandía se creó el Domain Name System (DNS), creado para poder manejar un número cada vez mayor de nodos en esa web a través de la delegación de la asignación de nombres en otros servidores distribuidos por la propia red. El grupo de Feinler quedó configurado como la autoridad última en la asignación de denominaciones, creando y gestionando los registros generales de los dominios .mil, .gov, .edu, .org y .com, que aún hoy se utilizan para identificar a miembros de la red que pertenecen a entidades militares, gubernamentales o educativas, entre otras.

En 1989 Feinler dejó el SRI y entró a trabajar en la NASA, donde ayudó a desarrollar los manuales y guías para el manejo del centro de internet de la agencia que formaba parte del Centro de Investigación Ames de la NASA. En 1996 se jubiló y desde entonces ha dedicado su tiempo y esfuerzo a la organización de una extensa cantidad de documentación, recopilada en unas 350 cajas, sobre el nacimiento de internet, que ella misma donó al Museo de Historia de la Computación situado en Mountain View, California.

Referencias

Sobre la autora

Rocío Benavente (@galatea128) es periodista.

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