A Edda le encantaba que mi esposa la llevara al regazo y la acurrucara contra su cabeza y cuello.
Edda era un pato eider, y la esposa citada era Magdalena. El matrimonio Heinroth crio durante casi treinta años, en su propio apartamento de Berlín, más de mil aves. Sus investigaciones sentaron las bases de la investigación comparativa del comportamiento de las aves, aunque el mérito se lo llevó casi exclusivamente él.

Una ornitóloga autodidacta
Magdalena Wiebe nació el 22 de abril de 1883 en Berlín. Desde muy joven, mostró un gran interés por los animales, y no sólo por su apariencia externa, sino también por su anatomía. A pesar de que se graduó en la escuela como la mejor de su clase, su padre no le permitió realizar el Abitur y estudiar en la universidad; aunque le dejó investigar, dibujar e incluso preparar diversas especies animales con la técnica de la taxidermia en la casa familiar.
Con solo 16 años, Magdalena continuó sus estudios de taxidermia en el Museo de Historia Natural de Berlín donde conoció a su futuro marido, el biólogo Oskar Heinroth. Tras conseguir Oskar el puesto de subdirector del Jardín Zoológico de Berlín en 1904, se casaron y ella pasó a llamarse Magdalena Heinroth. Para la ocasión, Oskar no regaló a Magdalena un anillo de compromiso, sino una curruca capirotada; parece que a ella no le desagradó esta original manera de acordar su boda. El matrimonio investigó conjuntamente durante toda su vida, aunque las contribuciones de Magdalena apenas han sido reconocidas. Se la ha considerado fundamentalmente como «la principal colaboradora» de Heinroth, aunque él se llevó los méritos por el trabajo en común. Oskar Heinroth, como empleado del Zoológico de Berlín, tenía sus obligaciones diarias, así que fue Magdalena quien se dedicó por completo a la cría de aves y a la investigación ornitológica, labor que él realizaba en sus ratos libres.
Ella cuidaba los más de mil polluelos de 286 especies de aves que criaban en su propio apartamento en Berlín. La documentación de las etapas del desarrollo (desde la eclosión, pasando por la muda, hasta la edad adulta) y del comportamiento de un gran número de aves reproductoras europeas estuvo en gran medida en manos de Magdalena. Ambos tomaban medidas y fotografías mientras estudiaban el crecimiento y el comportamiento de los polluelos y las estrategias de crianza de los adultos.
Adelantándose a Konrad Lorenz
Konrad Lorenz (1903-1989) recibió el Premio Nobel en Fisiología o Medicina en 1973, compartido con Nikolaas Tinbergen y Karl von Frisch, «por sus descubrimientos sobre la organización y expresión de modelos de comportamiento individual y social en la etología». Aunque un cuarto de siglo antes, el matrimonio Heinroth publicó Die Vögel von Mitteleuropas (1926-1933), un texto en cuatro volúmenes con más de mil páginas y 511 láminas a página completa, que sentó las bases de la investigación comparativa del comportamiento de las aves. Las mediciones diarias del progreso del desarrollo de las aves, las notas detalladas de Magdalena y la documentación fotográfica de los Heinroth fueron el origen de esta gran obra ornitológica. Tras la muerte prematura de Magdalena en 1932, Oskar Heinroth completó el último volumen de esta obra con su segunda esposa Katharina Heinroth (1897-1989).
Magdalena y Oskar también habían experimentado con gansos, como hizo Lorentz. Y observaron que estas aves «te miran de manera muy específica para memorizar la imagen con precisión». Si entonces «te ocupas de ellos, aunque sea por un corto tiempo, no te librarás de ellos tan rápidamente: chillan lastimeramente cuando te alejas y muy pronto te siguen fielmente». Esta descripción del comportamiento de los gansos es lo que Lorenz denominaría impronta años más tarde, en 1949. De hecho, Lorentz conocía a Oskar Heinroth y su trabajo sobre el comportamiento animal.

El trabajo «olvidado» de Magdalena y Oskar Heinroth se conoce actualmente gracias al libro Die Vogel-WG publicado en 2020 y escrito por Karl Schulze-Hagen (médico y biólogo de profesión e investigador en la historia de la ornitología como afición) y Gabriele Kaiser (investigadora asociada en el Departamento de Manuscritos de la Biblioteca Estatal de Berlín) quienes han recuperado las investigaciones realizadas por el matrimonio.
Probablemente el trabajo de los Heinroth fue olvidado por la situación política del momento y porque Die Vögel von Mitteleuropas se difundió poco en otros países al estar escrito en alemán.
Durante la Segunda Guerra Mundial, el 23 de noviembre de 1943, el acuario del zoológico y el apartamento de los Heinroth, situado encima de él, fueron destruidos en un bombardeo. El sótano en el que los ornitólogos guardaban sus placas fotográficas fue saqueado varias veces. Gracias a la zoóloga Katharina Heinroth, la segunda esposa de Oskar, una parte de todo ese material no se perdió y se encuentra actualmente en la Biblioteca Estatal de Berlín.
La de Katharina es otra historia, que merece ser contada individualmente.
Más información
- Bob Montgomerie, Magda and Kaethe, American Ornithological Society, 19 marzo 2019
- Karl Schulze-Hagen and Timothy R. Birkhead, The ethology and life history of birds: the forgotten contributions of Oskar, Magdalena and Katharina Heinroth, Journal of Ornithology 156 (1) (2015) 9-18
- Chantal Louis, Magdalena & die Vögel, Emma, 23 junio 2021
- Ina Heumann and Tahani Nadim, Magdalena Heinroth, Animals as Objects
- Magdalena Heinroth, Wikipedia
Sobre la autora
Marta Macho Stadler es doctora en matemáticas, profesora del Departamento de Matemáticas de la UPV/EHU y colaboradora en ::ZTFNews y la Cátedra de Cultura Científica de la UPV/EHU.